Utilizar papel pintado para decorar tus paredes vuelve a estar de moda, pero cuidado, no peques en exceso si no quieres que tu casa parezca que vive en los 70.
Hacer uso de este material para tus paredes puede ser un buen recurso decorativo muy acertado si lo que quieres es marcar la diferencia de espacios, por ejemplo en un salón, la zona de ver la televisión con la zona de comedor o simplemente, darle un toque especial.
Ten cuidado en las zonas donde puede que haya estampados que no vayan bien con el estilo o con la cantidad de detalles que tengan los tapizados. Usa el papel en relación a los detalles decorativos que tengas. Un sofá liso puede aceptar un papel con brocados barrocos, pero no un sofá de rayas, por ejemplo.
Si estás pensando el colocar papel en tu dormitorio, te recomiendo que sea en la zona del cabecero. Así dará protagonismo a la cama, ¡se lo merece! ¡cuánto nos aguanta! y es el único objeto decorativo que no podremos encontrar tal cual en otras estancias de la casa, además de ser imprescindible.
Si lo que quieres es colocarlo en una habitación infantil, puedes hacerlo en la pared en la que va apoyada la cama, para darle un toque informal y divertido, y no te preocupes por las manchas porque hay infinidad de modelos lavables.
Si decides empapelar la habitación al completo ten en cuenta que el dibujo que elijas puede acercar las paredes y dar la sensación de que la habitación es más pequeña quedando un resultado agresivo. Usa colores suaves y dibujos casi en miniatura y sencillos si es el caso de una habitación pequeña. Puedes elegir diseños de grandes dimensiones si la habitación es amplia y liminosa, pero te aconsejo que no uses colores fuertes y puros, más bien claros a continuación del color que hayas pintado la habitación, así será más modificable el estilo de la habitación cuando te canses sin necesidad de tocar el papel.
Si el papel tiene bastante detalles en sus dibujos, tienes que pensar que las cortinas no pueden llevar grandes estampados, yo te recomiendo que sean lo más sencillas posible.
Considera al papel como si fuese un elemento decorativo más, así que cuida su ubicación y colores. Puede aportarnos luz al igual que la pintura, pero también tiene dibujos, lo que lo hace más sofisticado. Recuerda que las rayas verticales dan sensación de que el techo es más alto y las rayas horizontales dan sensación de que recoge el espacio y sólo se suelen usar en habitaciones muy grandes para que resulten más acogedoras, así que elijas un dibujo de rayas o no, fíjate en la dirección en que están colocados los dibujos y elige siempre que estén en vertical, de techo a suelo, es mucho más acertado.
Hoy en día también existen papel para baños y cocinas resistentes a manchas y humedad que te ayudan a renovar sin demasiado dinero ni obras. Puedes resaltar en estas estancias alguna pared. En la cocina la zona de comer de la de cocinar o en el baño, la pared donde está colocado el espejo.
A la vez que van apareciendo más papel pintado en nuestras casas, van creciendo los diseños y las opciones a la hora de elegir el papel pintado que más nos interesa, se adapta a cualquier estilo decorativo y es un mercado creciente. Texturas, brocados, dibujos infantiles, con brillo, dibujos sencillos o más complejos, floral, abstracto... Las posibilidades son infinitas, sólo tienes que calcular los metros cuadrados que necesitas y la verdad es que tanto su colocación como su retirada cuando decidas hacerlo, son cada vez más sencillas, ya no se necesita cola ni demasiadas herramientas, sino que viene con adhesivo y con un par de manos puedes colocarlo. Si no te atreves lo más recomendable es acudir a un profesional.
Anímate a empapelar alguna zona de tu casa y crea el clima que deseas.
Observa & Decora
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