Me encanta que llegue este día, tenía una idea genial para hoy y celebrar con vosotros el Día del Libro. Si me preguntan por un libro para recomendar o cuál es mi favorito, me quedaría en blanco y seguro que no soy la única a la que le pasa esto. Claro que tengo favorito, pero no uno, ¡sino una lista! Pero hace poco recordé una frase preciosa, de la novela escrita en 1934 por Karen Blixen, "Memorias de África", y adaptada a película en los años 80, que tengo que decir que también es una de mis favoritas, junto con su banda sonora. La frase: "Cuando los dioses quieren castigarnos, escuchan nuestras plegarias". Hace reflexionar.
Así que hoy, haciendo homenaje al Día del Libro y a uno de mis favoritos, vamos a decorar según la novela "Memorias de África" para sentirnos que estamos en una casa en mitad de las colinas africanas, tan bellamente peligrosas...
El estilo que encajaría con esta preciosa novela, sería el estilo colonial. Recordemos que la protagonista es una danesa que va a África a estar con su marido, dueño de una plantación de café. Eran una familia adinerada, y como personas de aquella época, años 20, trasladaron muebles y multitud de enseres con lo que convivían en Dinamarca. Muebles de muy buena calidad, pieles, cómodos sofás tapizados... muy diferente a las cabañas de los indígenas de la zona. Pero este estilo colonial, sigue unas pautas.
El estilo usado por la protagonista de la novela para su nuevo hogar, a miles de kilómetros de la ciudad europea, busca la sensación de naturalidad, tanto el color como en material. Tonos tierra, marrones, rojizos sobre colores neutros blanco, gris o beige. La madera es la principal protagonista en el estilo colonial, sobretodo las de origen exótico como wengé, mindi, iroko o teca.
La piedra, el hierro forjado, el cristal, dan el toque lujoso acompañado de la calidez del mimbre, el ratán o el bambú.
Para los elementos decorativos opta por colocar complementos con historia, como candelabros, baúles, maletas, lámparas de forja, alfombras de piel animal o fibras vegetales, cortinas de telas ligeras como lino o algodón. La rafia también es una buena elección. No te olvides del animal print, de imágenes de animales como cebras, tigres, leones, elefantes, hipopótamos, rinocerontes... y objetos propios de la cultura africana como tambores, timbales, boomerangs, cuencos, jarrones... Todo con una estética tribal para dar color. ¡El perfecto choque de culturas!
La protagonista de nuestra historia es infectada de sífilis por su marido, el cual se marcha, dejándola en África y su maravillosa naturaleza. Vuelve a Dinamarca para curarse y a la vuelta se enamora de un cazador apuesto. Una historia demasiado romántica... Éste muere en un accidente, lo que hace que nuestra protagonista afiance raíces en ese lugar, ya nada le espera en su ciudad, ahora pertenece a África.
Observa & Decora
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